Cuando programamos proyectos o cualquier tipo de reto en Formación Profesional, siempre tenemos claro que la colaboración de personas o entidades externas al centro educativo son las que aportan ese plus a la experiencia de aprendizaje que deseamos construir.
En todo proyecto es aconsejable contar con profesionales que orienten o den una visión distinta a la que aportamos los docentes en el aula. La FP no puede pecar de ser demasiado académica y, de hecho, la Formación en los Centros de Trabajo (FCT) es la que aporta ciertas habilidades profesionales que son imposibles de transmitir desde el aula.
De todo modos, a través de cualquier tipo de proyecto, tenemos la excusa perfecta para acercarnos a ese entorno real profesional que permite al alumnado conocer de primera mano un sector determinado o desarrollar aquellas competencias personales que se requieren en un puesto de trabajo. En nuestra experiencia con el Aprendizaje Basado en Proyectos y en algún otro reto transversal que hemos programado, las visitas a empresas o la colaboración de profesionales que nos han acompañado, nos han permitido resolver y producir resultados profesionales.
Las redes sociales, como Twitter o a través de plataformas como eTwinning que para FP tienen proyectos específicos, pueden ser un buen medio para buscar este tipo de colaboraciones que motivan tanto al profesorado como los alumnos y que son también una buena excusa para trabajar competencias comunicativas y digitales.
Recientemente, hemos colaborado con dos profesionales y docentes de centros educativos y familias profesionales distintas a la nuestra, así como de comunidades autónomas diferentes. Marta Roldán del Departamento de Industria Alimentaria del IES Escultor Juan de Villanueva (Pola de Siero, Asturias) y Ricardo Fernández Guerra profesor del centro integrado de formación profesional (CIFP) Carlos Oroza de Pontevedra. Su visión fue un aspecto fundamental que los alumnos tuvieron en cuenta para el diseño de sus productos finales. En este enlace podéis conocer algo mejor el proyecto en cuestión: The oli partner. La valoración de Ricardo Fernández, que también aprovechó el reto para trabajar con sus alumnos, ha sido igualmente positiva como así lo atestiguan sus palabras:
En todo proyecto es aconsejable contar con profesionales que orienten o den una visión distinta a la que aportamos los docentes en el aula. La FP no puede pecar de ser demasiado académica y, de hecho, la Formación en los Centros de Trabajo (FCT) es la que aporta ciertas habilidades profesionales que son imposibles de transmitir desde el aula.
De todo modos, a través de cualquier tipo de proyecto, tenemos la excusa perfecta para acercarnos a ese entorno real profesional que permite al alumnado conocer de primera mano un sector determinado o desarrollar aquellas competencias personales que se requieren en un puesto de trabajo. En nuestra experiencia con el Aprendizaje Basado en Proyectos y en algún otro reto transversal que hemos programado, las visitas a empresas o la colaboración de profesionales que nos han acompañado, nos han permitido resolver y producir resultados profesionales.
Las redes sociales, como Twitter o a través de plataformas como eTwinning que para FP tienen proyectos específicos, pueden ser un buen medio para buscar este tipo de colaboraciones que motivan tanto al profesorado como los alumnos y que son también una buena excusa para trabajar competencias comunicativas y digitales.
Foodtruck FP Pontevedra |
"La experiencia con el reto Oli & Oil está siendo muy buena, todo un descubrimiento de hasta dónde puede llegar un alumno cuando se le motiva y dirige convenientemente.
Les he explicado a mis alumnos en que consistía vuestra propuesta y se lo han tomado muy a pecho (a pesar de la carga de trabajo de este final de trimestre). Han peleado y buscado alternativas a las dificultades encontradas: alguno me dice que las propuestas están bien sobre el papel pero que a la hora del desarrollo culinario no es tan fácil la cosa (algo de esperar). Lo importante es que a pesar de las dificultades ellos han seguido con el desarrollo de vuestras propuestas y han sacado un producto al público fundamentado en el espíritu de vuestras creaciones.
Muy bien además como se esfuerzan en explicar a profesores y alumnos clientes del Foodtruck de dónde proviene la propuesta, de otro instituto de FP de Valencia, les decían con muchísimo énfasis, un instituto que quiere sacar productos nuevos basados en AOVE al mercado europeo. Mis alumnos están encantados e ilusionados porque creo que entienden que en el futuro este reto podría convertirse en una salida profesional. Además han puesto su toque de gracia empleando aceite de una marca de Galicia en todas las elaboraciones.
Creo que estas pequeñas actividades de colaboración entre centros y especialidades de FP debieran ser un ejemplo para la clase política que nos dirige, aprenderían mucho de los alumnos."
Coincido plenamente con estas líneas finales; la Formación Profesional es una experiencia mucho más enriquecedora cuando trabajamos colaborando entre centros, docentes, familias profesionales y empresas. Buscar las condiciones y crear esas sinergias está en nuestras manos; siempre hay profesionales generosos que, como Marta y Ricardo, ofrecen su tiempo y conocimiento en esta FP tan valorada luego por nuestros alumnos.