No tiene mucho sentido defender una posición, la libre elección de centro educativo o la escuela pública, atacando a la otra parte como responsable de todos sus males. Existen muchas desigualdades, en función también de cada comunidad autónoma, demasiadas inversiones o gastos injustos, sobradas diferencias de las condiciones laborales entre funcionarios y no funcionarios. Incluso se presentan excesos, incumplimiento de normas o una escasez insoportable de recursos materiales y personales por parte de todo tipo de escuelas. Mucha disparidad que sólo hace disminuir la calidad de la educación en detrimento siempre del alumno.
Tampoco es sensato tener que defender los intereses propios en función del gobierno de turno. No podemos estar a merced de la ideología gobernante para tratar de prever nuestro futuro. No estoy en contra de las plataformas, asociaciones o encuentros educativos que defienden su parcela, pero sí es necesaria una mayor amplitud de miras, un mayor diálogo entre todos los tipos de centros y un acuerdo en los puntos en común que defendemos en nuestro sistema educativo. Al igual que es necesario denunciar los atropellos, irregularidades o injusticias vengan de donde vengan.
Me encanta conocer nuevas experiencias de otros centros, colaborar con otros docentes independientemente de sus centro de origen. Son escasos los ejemplos de colaboración entre escuelas, ya sea por la competitividad insana entre los mismos (concertada vs. concertada), los prejuicios o por falta de cultura cooperativa y rechazo mutuo (pública vs. concertada). Bastantes dificultades nos encontramos diariamente en nuestra labor para encima rivalizar con otros colegios o institutos para no perder alumnos, docentes o recursos materiales.
En las redes podemos encontrar magníficos ejemplos de docentes que comparten su trabajo y que están siempre dispuestos a colaborar o echarte una mano en cualquier proyecto sin necesidad de indagar en tu biografía profesional. En mi parcela, la Formación Profesional, encuentras fácilmente personas que consideran tu labor, te abren sus recursos o te invitan a trabajar con ellos sin tener en cuenta tu estatus laboral. De todas estas personas desprendidas o idealistas que pululan por las redes debieran los responsables educativos -políticos y directivos- tomar buena nota.
No es todo blanco o negro, y menos aún en educación.
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Totalmente de acuerdo, Óscar
ResponderEliminarTeniendo en cuenta que en una entrevista para un concertado todas las preguntas se ciñeron en mis creencias y "valores cristianos", y finalmente la vacante fue ocupada por una compañera de carrera de las " tontitas"pero prima de un cura...normal que la gente se indigne.Vosotros mismos hacéis de menos a gente que hemos aprobado la oposición y ninguneáis a la "chusma" de la pública,pues "sois élite y generáis élite" (escuchado en el acto de graduación del concertado al que va mi sobrino).
ResponderEliminarVuestros chicos van a la nieve,al extranjero de excursión, de convivencias a fincas de monjas exentas de IBI, mientras que los profes públicos nos tenemos q sudar cada proyecto para q chicos q no pueden ni pagarse los uniformes salgan alguna vez de su ciudad.
Aguanto con paciencia ver cómo dáis lecciones sobre calidad de la enseñanza, pero que encima pidáis que OS tratemos como iguales NO.Me quedo con mis quince horas de tiza y mi libertad de expresión.Escuece?Haber "estudiao"
Sinceramente no he escuchado nunca nada despectivo de algún compañero de la concertada sobre otro profesor funcionario. Más bien creo que mucho de lo mejorable es común en ambos lados.
EliminarTampoco me escuece que tengas 15 horas de tiza, me alegro por ti porque tus alumnos tendrán clases mejor preparadas que en centros concertados pese a los recursos extras que muchos padres e instituciones deben subvencionar a la administración.
Por eso hablo de igualar recursos para que no haya esas desigualdades de las que hablas, así como mayores controles de todo tipo.
No se trata de dar lecciones sino de ver los puntos en común y las carencias o defectos de ambos sistemas.
También estudié y aprobé unas oposiciones sin plaza, además de mi licenciatura de turno. Y no tengo primos "importantes"... ;)
saludos
Muchísimo respeto a todos los docentes, vaya por adelantado. No siento lo mismo por los centros concertados, empresas al fin y al cabo, y mucho menos por los concertados religiosos. No voy a extenderme en los motivos de éstos últimos porque creo que se los puede imaginar cualquiera. Sólo un apunte, las oposiciones sólo se aprueban si consigues plaza, lo digo por experiencia. Lo otro es aprobar exámenes. Nos ha pasado a todos y no es ninguna deshonra. Tampoco cuestiono que haya que ganarse la vida en cualquier empresa o negocio, todos tenemos que comer y mantener nuestra casa. Ahora bien, ¿igualar recursos? ¿mantener empresas con ánimo de lucro dedicadas a lo que puede hacer perfectamente la enseñanza pública? No way, decimos por Madrid que somos comunidad bilingüe inglés-español de toda la vida.
ResponderEliminarLástima que tengamos tantos buenos docentes trabajando para la concertada por falta de inversión en los centros públicos.
Saludos y enhorabuena por tu blog.
Gracias por tu comentario. Tienes razón al respecto de la oposición, mi intención era dejar claro al "anónimo" anterior que muchos también hemos estudiado no aprobado plazas y trabajamos como docentes interinos o en centros privados. Lo de "haber estudiao" me parece de mal gusto.
EliminarRespecto a lo las empresas con ánimo de lucro te doy también la razón; afortunadamente trabajo en un centro de iniciativa social donde más bien hay pérdidas y todo se hace gracias a mucho esfuerzo desinteresado. De hecho, me siento feliz de haber crecido como profesional en mi actual escuela. Aunque no estaría mal cambiarnos todos los papeles en alguna ocasión para entender posturas o formas de hacer.
Saludos y gracias de nuevo por tus palabras.